sábado, 12 de marzo de 2011

A sangre fría

A sangre fría (1966) es la gran obra maestra del genial escritor norteamericano Truman Capote. Basada en hechos reales que Capote investigó durante años como parte de su trabajo periodístico, cuenta la historia de dos hombres que a fines de los años cincuenta en una zona rural de Estados Unidos, entran a la casa de una familia para robar, no encuentran nada de valor, pero igual matan uno por uno al padre, la madre, el hijo y la hija. Los asesinos son atrapados, encarcelados y condenados a la pena de muerte. El periodista que los entrevista mientras esperan que se cumpla su sentencia nos describe a uno de ellos como un hombre perverso, sádico y sin escrúpulos, al otro como un hombre sensible que ha tenido una infancia difícil y se encontró acorralado por las circunstancias.

Esta mañana desayuné con una noticia que me recordó el comienzo del libro de Capote por su escalofriante parecido. Dos terroristas entraron por la noche al asentamiento de Itamar y mataron a puñaladas a los dos padres, a dos niños de 11 y 3 años y a un bebé de pocos meses. Al parecer se saltearon una de las habitaciones, de donde se escapó la hermana mayor de 12 años rescatando a dos hermanos más pequeños.

No es la primera vez que ocurre algo así, ya me imagino el desenlace. Tzahal va a atrapar a los asesinos, van a ser juzgados y sentenciados a una cadena perpetua por cada asesinato sin posibilidad de reducir su condena. Posiblemente igual serán liberados más tarde en un intercambio de prisioneros, por prisioneros israelíes vivos o muertos. En el exterior buena parte de los interesados en el conflicto palestino-israelí ignorarán este suceso por completo, seguirán afirmando que no hay razón para ninguna medida de seguridad israelí, que todas las tomamos por un estado de miedo cobarde e injustificado que nos infunden nuestros líderes, o por el placer de joder a los palestinos. Otros nos dirán que la culpa es de la familia que se fue a vivir a los territorios, que los asesinos no son terroristas sino unos pobres desgraciados que se vieron forzados por la ocupación israelí a apuñalar niños mientras dormían (no ignorarán este caso, solamente los casos similares ocurridos dentro de la línea verde). Pero entre los suyos no los considerarán asesinos sin escrúpulos ni pobres desgraciados, sino héroes nacionales. Cuando sean liberados serán aclamados por la multitud, pronunciarán discursos públicos, recibirán medallas de honor. Véase Samir Kuntar.

3 comentarios:

  1. “no ignorarán este caso, solamente los casos similares ocurridos dentro de la línea verde”

    Y los ocurridos en el Israel pre-67 cuando no había ocupación de la WB, o en Hebron y otras ciudades del Mandato Británico antes de que existiera Israel, o lo ocurrido en Safed antes del nacimiento del sionismo y cuando Palestina estaba bajo control otomano.

    “Pero entre los suyos no los considerarán asesinos sin escrúpulos ni pobres desgraciados, sino héroes nacionales. Cuando sean liberados serán aclamados por la multitud, pronunciarán discursos públicos, recibirán medallas de honor.”

    Lo que suele ser habitual en estos casos es que ahora salgan diversos grupos palestinos (Hamas, Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, FPLP, etc) atribuyéndose el atentado. Y es que matar judíos, "da puntos".

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  2. Me a sorprendido este artículo de hecho soy nuevo leyendo este blog muy interesante por cierto y a la ves que nos refleja muy bien lo que sucede en Isarael y el mundo Palestino, seguire de cerca el blog y muchas gracias por la informaciòn.

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  3. Entiendo pero no puedo respetar este relato. Creo basico para la resolucion de este conflicto que se empiecen a dejar de lado los relatos punzantes y dramaticos que canalizan las emociones mas humanas hacia un lado u otro de la frontera. Le recomiendo que deje la literizacion de asesinatos en esta guerra, cada uno de ellos es suceptible de caer en ese mismo tratamiento. Si todos fuesen relatados queda claro que el mundo verteria mas lagrimas palestinas por una simple y terrible cuestion de estadistica, que le recomiendo tampoco olvide. Y me despido con otra recomendacion, deje de mistificar el asunto, es bastante mas sencillo de lo que usted intenta hacer creer. Si tiene alguna duda, empiece por informarse de lo que dictamina la ONU, el derecho internacional y los tribunales internacionales. Vera que simple, tanto que probablemente el asunto no merezca ni un blog.

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